Tocamos, pero no conseguimos hundir al submarino.

Al final, tablas en El Madrigal. 2-2 fue el resultado con el que terminó el encuentro, y como ha dicho Marcelino en rueda de prensa, "la clave del empate ha estado más en el demérito nuestro que en el mérito del Villarreal".

Marcelino optó por la siguiente alineación: Javi Varas; Cáceres, Alexis,Escudé, Navarro; Navas, Medel, Trochowski, Perotti; Manu y Negredo. El mister decidió jugar con un punta, poniendo a Manu de enganche.


La primera parte comenzó con ocasiones para ambos equipos, siendo el Sevilla el dominador del juego. Tuvimos dos mano a mano para adelantarnos en el marcador: el primero fue de Navas en el 11' de partido, cuyo disparo se marchó por linea de fondo. La segunda ocasión frente a Diego López la tuvo Manu en el minuto 15' de partido; un disparo raso que saca el portero con el pie. 

-Quizás de haber marcado esas dos ocasiones claras de gol el partido hubiera cambiado muchísimo. Llevo mucho tiempo diciendo que estas son las ocasiones que deciden un partido, y el hecho de no materializarlas nos ha dado y nos va a dar muchos disgustos. La llegada la tenemos, y mucha, pero nos falta un poco más de contundencia arriba, sobretodo en los momentos que más necesitamos. Sin este factor a favor se nos van a ir muchos puntos. Confio en que con el paso del tiempo, la delantera vaya cogiendo más tono-.

En Sevilla llegaba a área contraria con facilidad, haciéndose eco de la pasividad de la zaga Villarrealense. En el 22' llegó la jugada que "determinó" el devenir del partido: Diego Lopez hace penalti a Perotti. El árbitro le saca roja y entra César al terreno de juego sacrificando a Cani. El penalti lo lanza Negredo; un disparo amansado a la izquierda del portero que para César, sin embargo, "el animal" se aprovecha del rechace para poner el 0-1 en el luminoso. 

Esta jugada determinó negativamente el discurrir del partido para el Sevilla. A pesar de ir arriba en el marcador y con un jugador más por la expulsión de Diego López, parecía que era el Villarreal quien jugaba con un futbolista más. Ahora le tocaba al Sevilla llevar el peso del partido, pero no asumió como debía ser sus galones. El Villarreal cerró sus lineas haciendo más difícil la fluidez del juego de los de Marcelino. Con desventaja en el marcador y un jugador menos, al "submarino" le tocó buscar de individualidad. Y en efectivo, Rossi en jugada personal buscó las cosquillas a la defensa nervionense y Fernando Navarro, infantilmente  comete penalti (min. 35). Rossi engaña perfectamente a Javi, y consigue materializar la pena máxima. Salvo un disparo de Medel que se marcha arriba, ninguna ocasión del Sevilla durante la primera parte. 1-1 fue el resultado con el que nos fuimos al descanso.


 En la segunda parte, Marcelino dio entrada a Kanouté, Rakitic por Manu y Trochowski, tratando de buscar el control del partido y la relajación del mismo, pues el gol, con superioridad en el campo, parecía cuestión de tiempo. Esto fue lo que se quería buscar con los cambios, pero el guión del partido fue totalmente distinto. Un sevilla que no conseguía conectar, muchas imprecisiones y prácticamente ninguna llegada con peligro.


Por el contrario, el Villarreal tomó el control del partido, siendo el único que creaba peligro. En el minuto 72, Marco Ruben aprovecha un error de Alexis (quien se queda protestando fuera de juego) para, con un disparo cruzado, poner el 2-1. A la desesperada, Marcelino jugó con 3 centrales, sacando a Campaña por Cáceres. El Sevilla lo intentó por banda sirviéndose de centros de Perotti y Navas, pero sin peligro. En uno de esos intentos Alexis se sirve de un balón de Navas para poner el 2-2 en el marcador. Con este resultado terminó el partido, y sufriendo hasta el final, pues el Villarreal pudo adelantarse de nuevo.

Un punto que es de agradecer teniendo en cuenta el juego realidazo por el equipo tras el primer panalti. No estoy contento con la imagen del equipo en la última hora. Hemos perdonado mucho a lo largo del partido y pudimos irnos a casa con cero puntos. Por cierto, chapeau por el Villarreal: no es facil sacar un partido adelante de la manera que lo han hecho, y además, doblegando a un equipo como es el Sevilla, que apriori es un equipo fuerte. Teniendo en cuenta que ha sido un partido como visitante contra un Villarreal, -equipazo-, no está del todo mal el empate, pero no me canso de decir que con más ambición podíamos haber atado al Villarreal de manos y pies. Todo esto que sirva para mejorar y ahora, a por la Real el próximo Sábado en el Pizjuán.